Cardona es un municipio a 30 minutos de Manresa con un gran patrimonio medieval.
Castillo de Cardona
Construido sobre una montaña desde donde se domina la cuenca central del Cardener, el castillo de Cardona fue, desde el siglo XI y hasta el XV, el núcleo residencial de los señores de Cardona. La situación geográfica del castillo responde a la necesidad que antiguamente había de poder tener un control absoluto del territorio.
El conjunto está dividido entre los pabellones señoriales y el recinto de la canónica de Sant Vicenç. Destacan la Torre de la Minyona –desde donde se tiene una vista privilegiada de Cardona–, el Patio Ducal, los baluartes de defensa o las vistas sobre el Valle Salino, un marco físico y natural dentro del que se localizan los afloramientos de sal en superficie.
La Canónica de Sant Vicenç, obra unitaria del siglo XI, es un magnífico ejemplar románico, que presenta una planta basilical de tres naves, rematadas por un transepto, donde se adosan tres ábsides semicirculares. La nave central está presidida por un amplio presbiterio, y está cubierta con una bóveda de cañón de medio punto. Debajo del presbiterio hay una cripta, que ocupa todo el espacio presbiteral y el ábside central. También destacan varios panteones y tumbas, como las del duque Ferran I y el conde Joan Ramon Folc I.
La Fundación Cardona Histórica lleva a cabo el servicio de visitas guiadas al conjunto monumental del castillo de Cardona, donde actualmente se ubica el Parador de Turismo.
El centro histórico
El centro histórico, declarado Bien de Interés Cultural en la categoría de Conjunto Histórico, cuenta con puntos destacados que no se pueden dejar de lado si se visita Cardona.
En el área urbana de la villa encontramos la iglesia de Sant Miquel. A diferencia de la de Sant Vicenç, era el templo parroquial de los mercaderes. Consta de una nave gótica y de dos laterales. En el interior del templo destacan los dos retablos laterales. Cabe resaltar, además, la cripta de planta octogonal, donde se guardan las reliquias de los Santos Mártires: san Celdoni y san Ermenter. Paseando por el Centro Histórico hallaremos también la plaza de la Fira y la plaza del Mercat, dos puntos neurálgicos de la ciudad, que a lo largo del año son escenario de las múltiples actividades que se celebran en el pueblo.
Sin movernos de la plaza de la Fira, bajo los soportales de Aimines, encontramos el Centro Cardona Medieval. Una exposición permanente, con un amplio repertorio gráfico y audiovisual, explica la génesis y la evolución de la villa hasta la construcción de su recinto amurallado.
Parque Cultural de la Montaña de Sal
La visita al Parque Cultural de la Montaña de Sal nos ofrece la posibilidad de conocer los afloramientos salinos de Cardona y el singular patrimonio natural y cultural que hacen de este sitio un lugar único en el mundo. El parque se ubica dentro de las antiguas instalaciones de Mina Nieves, una de las explotaciones de sales potásicas más importantes de Europa hasta el año 1990. Allí se puede contemplar la Montaña de Sal y disfrutar de un área museográfica, así como de los pozos de extracción y de la maquinaria de uno de ellos.